Por Bruno Cortés
En el Congreso se respira tensión. Mientras se discute el Presupuesto de Egresos de la Federación 2026 —el documento que define en qué y cómo se gastará el dinero público el próximo año—, el PRI salió a denunciar que Morena no está abierto a modificar absolutamente nada de lo que propone la oposición. El diputado Rubén Moreira, líder de la bancada priista, aseguró que sus iniciativas fueron ignoradas y que eso, más que una diferencia política, es un error que terminará afectando a la gente.
Moreira dijo sin rodeos que Morena y sus aliados quieren mover dinero del presupuesto, pero no para fortalecer seguridad o justicia, sino todo lo contrario: reducir recursos a estos sectores. Y eso, asegura, es grave, porque el país sigue enfrentando violencia, desapariciones y falta de acceso a justicia. Para él, quitarle dinero a estas áreas es “hacerle un daño al país”.
El PRI también propuso incluir programas sociales, pero según Moreira, Morena los rechazó sin debatirlos a fondo. Uno de esos programas era para apoyar a familiares de personas desaparecidas, y otro proponía bajar la edad de acceso a apoyos para adultos mayores de 65 a 60 años. Ambos fueron desechados, lo cual —dijo— genera frustración porque no se trata de pleitos partidistas, sino de ayudar a quienes más lo necesitan.
En el tema de seguridad, Moreira arremetió contra el gobierno actual. Aseguró que la estrategia de la presidenta Claudia Sheinbaum fracasó desde el inicio porque heredó, según él, un país con violencia creciente y una estructura debilitada por el sexenio de López Obrador. Y si a eso le suman menos presupuesto, advirtió, es como intentar apagar un incendio con un vaso de agua.
También lanzó una crítica al campo mexicano. Dijo que, si se aprueba el presupuesto como está, México dependerá todavía más del extranjero para alimentar a su población. Recordó que el sistema agrícola y energético del país fue debilitado en los últimos años, y que sin inversión, será imposible recuperar la autosuficiencia alimentaria que tanto se promete en los discursos.
Finalmente, cuando le preguntaron sobre la agresión contra la presidenta en el Centro Histórico, Moreira respondió que fue un error de seguridad del gobierno federal y que, si fuera por él, Claudia Sheinbaum debería despedir a todos los responsables de protegerla. “Se puso en riesgo al Estado mexicano”, dijo, y aunque criticó a Morena, también reconoció que la Presidenta no merece ese tipo de agresiones.
Lo que está claro es que el debate del Presupuesto 2026 no será solo de números, sino de discursos, reclamos y diferencias profundas entre gobierno y oposición. Mientras Morena defiende su proyecto de gasto, el PRI intenta visibilizar lo que considera recortes peligrosos y oportunidades desperdiciadas. El verdadero reto será ver si hay espacio para acuerdos… o si el presupuesto se aprueba a golpe de mayoría.
